Aunque quiera evitarlo

Aunque quiera evitarlo es complicado no darse cuenta que hoy es San Valentín. Y me he dado cuenta que es más complicado para quien no tiene pareja que para quien no la tiene. Para los que la tienen, un día más. Para los demás, o para quien tiene al "suyo" lejos, es complicado.

Una canción, muchos deseos

Ven a borrarme los fracasos de mi mente
Ven a llenarme de caricias diferentes
Ven a sacarme de este pozo de amargura
Donde me encuentro yo

Y dame el agua de tu fuente cristalina
Dame el beso que sin darse se adivina
Que estoy sediento de cariño sin medida
Cansao de dar amor

De volar siempre buscando una fantasia
De nido en nido como paloma perdida
Estoy cansado de secretos y mentiras
Buscando un gran amor

Que sea capaz de enamorarme cada dia
Velar mi sueños mientras que duerme mi vida
Mirarme siempre con la mirada encendia
Igual que miro yo

Dame tu mano sin temor a equivocarte
Si tu mentiendes yo nunca quise engañarte
Dame las cosas que nunca supieron darme
Te llenare de amor

Y no hagas caso de lo que diga la gente
Tienen envidia pq yo amo diferente
Pq mi amor es como un pajaro silvestre
No se puede enjaular

Y vuela siempre buscando la fantasia
De nido en nido como paloma perdida
Esta cansado de secretos y mentiras
Buscando un gran amor

Que sea capaz de enamorarme cada dia
Velar mi sueño mientras que duerme mi vida
Que sea capaz de enamorarme en cada dia
Velar mi sueño mientras que duerme mi vida
Mirarme siempre con la mirada encendia
Igual que miro yo…

Y sigues ahí...

Pequeñas señales, llamadas, justo en el momento en el que decido que te vayas de mi vida, tú vuelves, aún sin saber mi decisión, y me llamas porque sabes de mi tristeza, de mi preocupación, y llamas sólo para decirme "Ya verás como todo saldrá bien"

Y todo sería más fácil si estuvieras a mi lado. Si te sentaras conmigo en la consulta del médico cuando me expliquen que significa aquel resultado. Aquel que me dieron sin piedad, no es nada malo, no hay delicadeza.

Y si se convierte en algo malo dentro de un tiempo? Hay suficientes casos de tumores en mi familia como para que esto me quite el sueño, no? Y tú lo entendiste, no le quitaste importancia, no me dijiste "qué bobadas dices", o "no pienses en eso", tu fuiste franco y directo. YA VERÁS COMO TADE SALE BIEN. Y fue más lo que no dijiste que las palabras que salieron de tu boca. Fue más la llamada y el "estaré a tu lado" que no te atreviste a pronunciar que tus ánimos, que tu comprensión.

Yo ahogaba el llanto porque por primera vez en mucho tiempo hubiera necesitado abrazarte, yo! la reina del hielo! Intentaba no llorar bromeando contigo, y tú lo notaste. Y te reiste, y me hiciste reir.

Que te vaya muy bien hasta nuestro reencuentro. Tengo ganas de verte......

La reina del hielo

Siento que te vas, quizá sean imaginaciones mías, pero te siento más lejos que nunca, Y eso que aún nos has recorrido todos esos kilómetros que darán el verdadero pistoletazo de salida a lo nuestro. Pero siento que te vas.

Y no me parece justo, porque yo había empezado a quererte. Y eso que me había prometido mil veces que no lo haría, ya ves, en las promesas que me hago a mí misma siempre me va fatal.

Y no es justo porque también siento que ha llegado el momento de que alguien se enamore de mí. De que sea el otro el que me eche de menos, y el que me tenga como centro de sus sueños, me estoy volviendo egoísta, ya lo sé. Pero me apetecía de verdad. Me apetecía no ser yo la que llora en silencio, aun sin lágrimas, me apetecía no ser yo la que no deja de pensar en tí, sino que fueras tú quien pensara en mí. Y yo comportarme como la reina del hielo que todos creen que soy. Y en verdad puede que sea así.

Me van mejor las historias en mi cabeza que en la vida real. Porque en mi cabeza te besaría sin preguntarme nada, y cuando nos vemos son tantas las preguntas que mis labios no se prepararan nunca para besar los tuyos. Y eso que estén deseando hacerlo.

Así que, decidido, dejo de quererte en este instante, dejo de echarte de menos, dejo de pensar en tí, al menos hasta que reciba una señal de que tu sí que piensas en mí, de que me echas de menos, al menos hasta que reciba la señal de que no estoy de nuevo haciendo el tonto.