La espada de Dámocles

Planea sobre mi cabeza de nuevo, de nuevo parece que todo depende de esta maldita enfermedad.

Esto no se cura, no tiene cura, solo se asimila, se pasan rachas malas, rachas buenas, y yo estoy en una mala mala. Pero lo que más me preocupa es que conozco este camino y se que aun puedo caer mas bajo. La ultima vez me costo dos años de terapia y unos cuantos meses de desenganche del prozac. ¿Podré con esto ahora?

No puedo contárselo a él porque no se si lo entendería, no se si estamos en el mejor momento para hacernos ese tipo de confidencias. Mis padres piensan que en casa estaría mejor, que la solución de mis males es volver a vivir bajo su ala. Así que esta tarde me tendré que sentar frente a un extraño, que se ha convertido en mi confidente, para contarle en voz alta lo que no me he atrevdio a contar a nadie, y seguramente me recomiende que vuelva a terapia.

Y ya ves!, lo escribo aquí, con la certeza de que puede que nadie lo lea, pero a mi me sirve para apartar durante unos minutos esta espada que me agobia, que me acojona y que me trae demasiados malos recuerdos.

Otra vez, en plena recaída de esta puta enfermedad que pocos consideran seria. Esta puta bulimia que me acabara llevando a la tumba de un infarto.

Le pido a Dios o a quien coño lleve las riendas de esto que haga que mis padres no se preocupen más de lo debido, que me dejen enfrentarme a esto sola,que ya voy teniendo edad, pero que no vayan muy lejos porque aun me considero muy pequeñita. Y que me de fuerzas para contárselo a él, y que su respuesta solo sea el abrazo que llevo tantos meses esperando.....