Ojos

Le sorprendo mirándome al otro lado del comedor. No dice nada, sólo me mira y yo me apunto mentalmente que después le recuerde que tiene que subtitular depende qué miradas. La suya dice tanto…

Nunca pensé que esto fuera real, nunca pensé que esto fuera a acabar aquí, y quizá porque siento que no soy merecedora de tanto amor. De sus manos, de sus labios, de la manera que tiene de cogerme de la cara para besarme. De la manera en la que siempre vuelve a por un beso más aun cuando los dos nos hemos despedido ya.

No estoy a su altura, quizá yo ya haya perdido la inocencia. 3 años con alguien 26 años mayor cambian mucho la forma de ver las cosas, la manera de vivir las cosas.

Él me promete, porque puede, un futuro juntos. Quizá un mañana, quizá una casa. Y realmente ahora soy consciente, como nunca, que me sigue dando miedo el compromiso.

Y sin embargo.... SOY FELIZ!!!!!!